Somos Olivicultores
Pasión y tradición familiar para elaborar un virgen extra único.
Con más de dos siglos de historia, la marca Artajo tiene sus raíces profundamente arraigadas en Navarra desde el año 1780.
En el año 1998 se recupera la tradición olivarera con un enfoque modernizado y sostenible, manteniendo el carácter familiar desde los orígenes.
Nuestra historia comienza con un pequeño molino y una modesta bodega en el corazón de Tudela. Y continua en 1998, cuando decidimos apostar por nuevas plantaciones e inauguramos un nuevo molino, una moderna bodega y nuevas instalaciones en el corazón del olivar.
Para nosotros, el olivo es mucho más que un árbol. Es el origen de la calidad del aceite. Y con él, a través de un enfoque innovador y ecológico en el cultivo, hemos desarrollado una gama única de aceites que reflejan la diversidad de los tres climas que nos rodean: mediterráneo, continental y atlántico. Esta influencia climática dota de una personalidad única a nuestras aceitunas y aceites.
Nuestro olivar,
el olivar del norte
El origen de la calidad
Después de un innovador ensayo en el que plantamos más de 70 variedades de olivo de todo el mundo, seleccionamos las 14 que hoy conforman nuestro olivar.
La finca Los Llanos está ubicada muy cerca de Tudela, en un enclave único para la olivicultura. Su situación en pleno Valle del Ebro, entre las Bardenas Reales y el Moncayo le confieren un clima de contrastes con más de 3.300 horas de sol al año, lo que garantiza la singularidad de un AOVE con un carácter aromático único.
La preservación de nuestro singular entorno es una máxima de Artajo desde sus inicios, apostando por la sostenibilidad y la biodiversidad que nos rodea. Para ello, contamos con casi 300 hectáreas que pueden absorber alrededor de 3000 toneladas de CO2.
La almazara
El corazón de Artajo
La almazara está estratégicamente ubicada en el corazón de la plantación, lo que permite minimizar el transporte que se realiza en cajones, para preservar la integridad del fruto.
Nuestro sistema de recepción de aceituna refrigerado, coordinado a la perfección con el molino, nos permite que la aceituna pase del árbol a la bodega en menos de dos horas, garantizando así la frescura y limpieza de nuestros AOVEs.
Durante todo el proceso, la extracción se realiza en frío, entre 18 y 20ºC, con un molino de doble corte y batidora y centrífugas refrigeradas.
El filtrado en línea, permite una óptima conservación de las cualidades organolépticas del aceite, que ya en bodega, se mantendrá a temperatura controlada (18-20ºC) en atmósfera inerte con nitrógeno. El envasado se realiza en la propiedad bajo demanda, en botellas oscuras e inertizadas, para garantizar que llegue a nuestros clientes como recién exprimido.
Nuestro Equipo, Nuestra Familia
Pasión y excelencia en cada detalle
En Artajo, nuestro equipo humano es el corazón que impulsa nuestra excelencia cada día. Desde la cosecha hasta la molienda, trabajamos con dedicación y maestría para asegurar que cada gota de aceite refleje nuestra pasión por la calidad. Somos una gran familia que cuida cada detalle, desde el cultivo del olivar hasta la elaboración de nuestro aceite de oliva virgen extra.
Cada miembro de Artajo aporta su experiencia y amor por el trabajo, creando un ambiente de colaboración y mejora continua. Juntos, trabajamos duro día a día para hacer de Artajo el mejor olivar del mundo, donde la tradición se une con la innovación para ofrecer los mejores aceites.
PREMIOS
Los pilares de nuestra excelencia
Cimiento, conocimiento y reconocimiento
Nuestro mejor premio es la fidelidad de nuestros clientes, pero los reconocimientos, como el de mejor almazara ecológica del mundo en 2024, nos impulsan a mantener la ilusión por seguir mejorando la calidad de nuestros productos.
El cimiento se encuentra en la sólida base de valores y principios que nos guían desde el primer día. Estos valores, como el respeto por la tierra, el compromiso con la calidad y la pasión por nuestro trabajo, son los cimientos sobre los cuales construimos nuestra marca y nuestra reputación.
Nos esforzamos por estar siempre a la vanguardia de la investigación y la innovación en el mundo del aceite de oliva, buscando constantemente nuevas formas de mejorar nuestros procesos y productos, expandiendo así nuestro conocimiento.
Por último, el reconocimiento a través de múltiples premios es la evidencia de nuestro firme compromiso con la excelencia, una guía que ha marcado el camino de Artajo desde su fundación y que nos motiva a seguir innovando y perfeccionando nuestra artesanía en el mundo del aceite de oliva.
